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Francia

Covid-19: ¿debemos parar de contar las contaminaciones?

Elsa de La Roche Saint-André
Periodista de sección CheckNews
Liberation 11/1/2021

Si bien el no tomar medidas puede ser una decisión sensata, si se presume que las medidas pedidas por la oposición no lo son, posiblemente sí había un abanico razonable de nuevas proposiciones a considerar en la política gubernamental de Salud Pública frente a Covid-19. Disminuir la cantidad de test PCR evitando realizarlos a personas sin síntomas era una de ellas y también se podía haber establecido cesar el conteo y difusión día a día de nuevos “casos”, siendo la mayoría de estos asintomáticos o con sintomatología muy leve. Esta política ya se está considerando en países europeos como España y Francia, tal como lo expresa esta nota publicada en el periódico “Liberación” francés.

Ante la descorrelación entre los nuevos casos positivos y las formas graves que requieren hospitalización, varios científicos y políticos reclaman un cambio de la grilla de lectura para seguir la epidemia, y centrarse solo en las formas graves.

Se plantea la pregunta (por parte de Nick el 8 de enero) sobre la relevancia de los indicadores para reportar la situación epidémica, tras las declaraciones del inmunólogo estadounidense Anthony Fauci. El consejero principal de la Casa Blanca sobre la crisis sanitaria, declaró el 2 de enero en una entrevista con ABC News que “A medida que uno avanza y las infecciones se vuelven menos graves, es mucho más relevante centrarse en las hospitalizaciones que en el número total de casos”. En la misma entrevista, también dijo que este cambio de indicador era «particularmente relevante si tienes una infección mucho más asintomática y muy poco sintomática, sobre todo en personas que están vacunadas y estimuladas».

Desfasaje espectacular

Este es precisamente el caso ahora, especialmente en países donde las campañas de vacunación ahora se centran en inyectar dosis de refuerzo. En Francia, el 78,8 % de la población recibió al menos una dosis de vacuna, el 77 % todas las dosis requeridas y el 36,6 % una dosis adicional de refuerzo. Cobertura de vacunación que ha contribuido a la reducción de las formas graves, explica a CheckNews el profesor de enfermedades infecciosas y tropicales Bruno Hoen: «Los datos disponibles a día de hoy muestran que una vacunación completa y reciente permite proteger contra las formas graves, e incluso muy a menudo contra las formas sintomáticas bastante cortas, incluso con omicron «. Al mismo tiempo, la variante ómicron, que se ha convertido en la mayoritaria entre los casos de Covid-19, parece más contagiosa, pero menos determinante en los casos graves (sin saber si es intrínsecamente menos grave, o si esta menor gravedad se debe al hecho de que afecta a personas que son inmunes, a través de infecciones pasadas o vacunas).

Lo cierto es que las cifras de Salud Pública de Francia (SPF) muestran una brecha significativa en las últimas semanas entre el número de hospitalizaciones y el número de pruebas positivas de Covid-19. Si bien observábamos, hasta ahora, una forma de paralelismo entre las dos curvas -teniendo en cuenta el desplazamiento de una semana entre ellas, y que corresponde al tiempo promedio entre una prueba positiva y una posible hospitalización (y una semana aún entre la hospitalización y la posible muerte), la curva de nuevos contagios ahora sube con fuerza, dejando “atrás” las curvas de hospitalizaciones, ingreso a cuidados críticos y muertes.

Otra forma de representar esta descorrelación entre las contaminaciones y la ocurrencia de formas graves: el porcentaje de hospitalizaciones frente al número de casos nuevos. Su declive, que comenzó a principios de 2021, se aceleró junto con la aparición de la variante ómicron. De más del 9% la semana del 4 al 10 de enero, pasó a casi el 2% la semana pasada (que también incluye el 1 y 2 de enero).

«No tiene ningún sentido»

El aumento de nuevos casos, sí refleja innegablemente la dinámica epidémica, también se ha visto amplificado por el uso cada vez más sistemático del despistaje. Con la aceleración de la circulación del virus provocada por omicron, el número de test realizados por los franceses se ha disparado. “La difusión extremadamente rápida de la variante ómicron ha generado un aumento excepcional de la contaminación, lo que ha llevado a los franceses a someterse a pruebas masivas. Así, las cifras de despistaje más recientes están alcanzando proporciones sin precedentes”, señala la Dirección General de Sanidad. Que detalla: “entre el 31 de diciembre de 2021 y el 6 de enero de 2022 se realizaron cerca de 9,5 millones de test”, un aumento en el volumen de pruebas “del 25% respecto a la semana anterior. Durante los picos anteriores, se realizaron más de 3 millones de test por semana en diciembre de 2020 y 5,9 millones en agosto de 2021″. La mayor frecuencia de los test y el aumento de casos de contacto que se testan a su vez, está empujando a las personas asintomáticas a hacerse la prueba (lo que no necesariamente habrían hecho antes), aumentando aún más el número de casos. Lo mismo ocurre con las autopruebas, que se han generalizado y dan como resultado la detección de personas que no se habrían hecho el test antes.

Por lo tanto, entre el desacoplamiento del número de nuevos casos/hospitalizaciones y la inflación de las pruebas, «no tiene ningún sentido ahora contar las pruebas positivas», dijo el epidemiólogo Bruno Hoen. En su opinión, “debemos dejar de usar este indicador, y fijarnos únicamente en el número de formas graves que ingresan en el hospital. Este es el indicador importante».

Una opinión compartida por muchos otros científicos, en Francia y en el extranjero: desde el jueves, se registran más de 300 millones de casos diarios en todo el mundo. El profesor de psicología de la salud en el University College London, Robert West, señala que el número de formas sintomáticas es «definitivamente menos importante de lo que era» al comienzo de la pandemia, informó este sábado el diario indio The Economic Times. «Si hubiéramos tenido esta cantidad de infecciones entonces, habríamos tenido una cantidad astronómica de muertes». El aumento contenido de las formas graves se atribuye nuevamente a la combinación de una vacunación intensificada y una variante ómicron menos peligrosa. Esto parece confirmar el ejemplo británico.

“Lo que importa son los casos graves, las hospitalizaciones, no la incidencia”, considera también el virólogo Christian Drosten, asesor del Gobierno alemán en la gestión de la pandemia, en un podcast subido el 4 de enero por la radio alemana NDR. Estos indicadores han conocido un «desacoplamiento», agrega, gracias a la campaña de refuerzo en curso entre nuestros vecinos del otro lado del Rin.

«Factor miedo»

Sin embargo, no todos los científicos creen que debemos dejar de tomar en cuenta por completo el número de casos de Covid-19, un barómetro clave que ha ocupado un lugar muy importante en el seguimiento de la situación epidémica desde los inicios de la crisis, y motivó las diversas medidas restrictivas que siguieron. Para el epidemiólogo Yves Coppieters, entrevistado por LCI, debemos seguir examinando «los dos indicadores, incluso si ya no están vinculados». Porque el «seguimiento de la contaminación» permite también «seguir las características de las personas contaminadas». Según él, esto es fundamental cuando sabemos que «la edad, las comorbilidades y el estado vacunal» son datos determinantes para «anticipar la evolución de la epidemia».

Si bien no hay consenso, esta reflexión sobre el indicador a privilegiar se ha extendido en todo caso al mundo político, e incluso ha hecho evolucionar la comunicación de varios gobiernos. En los últimos meses, varios miembros del Partido Conservador británico han pedido así a su gobierno que deje de publicar diariamente el número de casos de Covid, por considerar que ya no es un barómetro de la gravedad de la pandemia, sino al contrario “alimenta el factor miedo y vuelve irracional la toma de decisiones públicas”, como escribió el Daily Mail.

En cuanto al Ministerio de Salud de Singapur, dio este paso al anunciar, el 6 de diciembre, que dejaría de publicar comunicados de prensa diarios sobre las cifras de contagios de Covid, información que, sin embargo, permanece disponible en el sitio web del ministerio. Esta elección se basa tanto en la dificultad de distinguir a las personas sintomáticas de las asintomáticas entre los casos cotidianos, como en la idea de que la pandemia de Covid-19 está mutando hacia una enfermedad endémica. El especialista en enfermedades infecciosas Hsu Li Yang, contactado por el diario singapurense The Straits Times, había considerado, sin embargo, que sería relevante revertir esta decisión en caso de que surgiera la variante omicron, sugiriendo que sería útil «seguir su propagación entre personas previamente vacunadas o infectadas”.

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